Hotel Las Majadas, Valle del Maipo – Un destino único y un mundo de experiencias, descanso e inspiración.

Pasear por los más lindos jardines, compartir una buena mesa, degustar los mejores vinos de la zona y disfrutar en la cima de la montaña, son parte del escenario de este maravilloso hotel.

Por Gabriela Hales

Hotel Las Majadas es conocido principalmente por su Palacio que data del siglo XX rodeado por un parque de ocho hectáreas. Este Palacio fue construido en 1907 por el arquitecto Alberto Cruz Montt, nacido en Valparaíso en 1879, quien construyó también el Palacio Astoreca, el Palacio Ariztía, y la Facultad de Artes de la Universidad de Chile. Una de sus obras más conocidas, es el Club La Unión.

En el 2010 Wenceslao Cesares, Pablo Bosch y Diego Valenzuela, decidieron restaurarlo y el encargado de la reconstrucción fue el arquitecto Teodoro Fernández, Premio Nacional de Arquitectura 2014, quien lo convierte en un acogedor “Centro de Conversaciones”, que contribuye al crecimiento social en Chile. Es así como nace el proyecto Las Majadas. Un destino perfecto para realizar reuniones corporativas y talleres que permiten ampliar las miradas. Su Palacio, con más de cien años de antigüedad, se ha convertido en un lugar que permite crear instancias de conversación y creatividad para las empresas y sus colaboradores.

El Hotel, enfocado en recibir turistas extranjeros y nacionales para que vivan una experiencia única, cuenta con programas experienciales que van más allá de una estadía de hotel y con el servicio personalizado que caracteriza a Las Majadas.

Sus 50 habitaciones, todas con vista a centenarios árboles, están perfectamente decoradas con un toque minimalista que invitan a relajarse y a una desconexión total para quienes desean salir de la ciudad, disfrutar de una gastronomía de excelencia y de sus paisajes.

En su construcción se usaron materiales nobles tales como encinas y olmos, lo que transmite elegancia e inspiración.

Situado en el Valle del Maipo, Pirque es uno de los sectores con más tradiciones vitivinícolas de Chile, y a tan sólo 50 minutos de Santiago y 40 minutos desde el aeropuerto Nuevo Pudahuel. Su ubicación privilegiada permite conocer algunos de los mejores vinos del país y una naturaleza rica en su variedad. Impacta toda la naturaleza que rodea el Hotel, con árboles de más de cien años y una laguna rodeada de mucha vegetación.

Su parque, que evoca paz y tranquilidad, cuenta con más de mil especies entre las que destacan araucarias, peumos, sequoias y cipreses, que cambian de color con las estaciones del año, convirtiéndolo en un paisaje mágico e inspirador.

Las Majadas ofrece diferentes experiencias con estadía, tanto en sus instalaciones como en los alrededores. Entre sus actividades están los trekkings de diferentes dificultades y por asombrosos rincones de la Región Metropolitana, cabalgatas por algunos de los paisajes más llamativos de la zona, además de visitas a reconocidas viñas, talleres de coctelería y bakery, entre otros.

Para los huéspedes también están los tour Majadas todos los días, que es parte de la experiencia para que los visitantes se lleven un poco de la cultura e historia del Valle del Maipo y Pirque. Este tour se realiza con un recorrido a través del Parque, donde se cuenta la historia del lugar y de su flora y fauna. Todo esto va acompañado de una copa de vino de las viñas de la zona.

También cuenta con una piscina al aire libre y el recién inaugurado Kura Spa, que ofrece diferentes tipos de masajes, aromaterapia, sauna húmedo y seco para el descanso y la desconexión total.

Acá se puede venir con amigos, en familia y, en especial, en pareja, teniendo al frente este Palacio donde se respira un aire muy romántico. Se cuenta que han venido a pedir matrimonio y todo está más que dispuesto para esa ocasión. La mejor champagne, el mejor vino y la excelente gastronomía liderada por el chef Marcelo Saldaña, quien sorprende con sus exquisitas preparaciones y quien le ha dado un sello muy especial al restaurant Sequoia. Una cocina muy local y fresca con productos de la zona, desde donde se potencia a los emprendedores locales. Además, cuenta con su propia huerta dentro del Parque, donde se utilizan productos sacados de la propia tierra, lo que le da un valor y un sabor distinto.

Todo está en sintonía. Un Palacio que incita a crear encuentros y promover nuevas ideas; un Hotel que posee una tranquilidad que invita a la introspección; un servicio de primera en cada uno de sus rincones, y la gastronomía de lujo, maridada con los mejores vinos de la zona.